La planificación inteligente de rutas puede reducir los costes de combustible para las flotas de vehículos

El aumento de los precios de combustible ejerce en estos momentos una gran presión sobre los gestores de flotas, que deben enfrentarse a un dilema: no quieren disminuir las operaciones de los vehículos, pero tienen que recortar gastos por donde sea. De hecho, reducir los costes de las flotas se ha convertido en un objetivo principal para ellos.

Las empresas de mayor envergadura, que cuentan con presupuestos más amplios, pueden sustituir los vehículos de motor de gasolina o diésel por vehículos eléctricos para disminuir en gran parte los costes de combustible. Ello también tiene la ventaja de reducir la huella de carbono de la flota al emplear una fuente de combustible más limpia y ecológica.

Sin embargo, para las flotas más pequeñas, la posibilidad de pasar a una opción ecológica de la noche a la mañana resulta irrealizable. En efecto, los recientes incrementos de los precios de combustible han sido tan altos y repentinos que muchas de aquellas pueden darse con un canto en los dientes por no haber tenido que cerrar. Para ellas, las reinversiones sustanciosas no son más que un sueño lejano en la actualidad.

Hay ciertas medidas que pueden tomar los gestores para reducir los costes de combustible sin incurrir en otros gastos, por ejemplo, promover las buenas prácticas en la carretera entre los conductores. Así, no desperdician la gasolina ni abusan de los frenos en los trayectos. Cuando se usa el pedal de freno en exceso, no solo se consume más combustible innecesariamente al hacer demasiadas paradas y arranques, sino que también se desgasta más el vehículo. Las buenas prácticas redundan en beneficios económicos en dos niveles.

Dicho esto, además de animar a los conductores a tener en cuenta el tráfico, los vehículos y el presupuesto para combustible de la empresa de manera más eficiente, ¿hay algo más que puedan hacer los gestores de flotas para combatir esta crisis de precios?

Por suerte, la respuesta es sí. Existe una tecnología moderna disponible que no requiere una gran inversión de capital, pero que puede aminorar los costes de combustible para todos los vehículos. Movildata es una de tales herramientas vanguardistas de gestión de flotas. Utiliza datos de historial de trayectos, de economización del combustible y otro tipo de información para crear mapas de rutas inteligentes para los gestores de flotas con el fin de reducir los costes de combustible.

El software de telemetría a bordo y planificación siempre ha permitido a los gestores diseñar las rutas más eficientes en técnicos términos de tiempo desde un punto A hasta un punto B. No obstante, a menudo son rutas que aprovechan poco los datos y se centran solo en los trayectos «más cortos» en línea recta. Movildata puede planear rutas que, por ejemplo, sorteen las congestiones de tráfico conocidas (por ejemplo, en los centros urbanos) y permitan a los trabajadores conducir de manera más uniforme, sin tantas paradas y arranques.

Ello se traduce en un menor desperdicio de combustible en atascos, un menor desgaste de los vehículos, la reducción del impacto medioambiental para el negocio en plena crisis del combustible y, gracias a las rutas diseñadas de manera innovadora, una disminución del estrés que sufren los conductores en su día a día. Puede que dichas rutas superen un poco al trayecto óptimo en línea recta en términos de tiempo, pero con las primeras a menudo los conductores pueden desplazarse de manera más eficiente, con menos gasto de combustible y menos tiempo perdido en atascos.

Al usar algoritmos avanzados de planificación de rutas en plataformas de gestión de flotas de siguiente generación como Movildata, las flotas pueden hacer que cada kilómetro recorrido hasta la entrega cuente, en vez de desperdiciar el tiempo en el tráfico, gastar combustible e incrementar la presión sanguínea del conductor. La planificación inteligente potencia la efectividad y eficiencia de cada ruta que recorren los conductores, aminorando tanto el estrés cotidiano como los gastos de combustible para las flotas de vehículos. En algunos casos, Movildata ha supuesto para estas empresas un ahorro de hasta el 6 % de dichos gastos habituales. En ciertos casos, puede constituir la diferencia entre la supervivencia de la compañía en tiempos de dificultades financieras y su completa desaparición.

Si bien no cabe duda de que el objetivo primordial de los sistemas de planificación avanzada de rutas como Movildata es ahorrar gastos de combustible en estos años tan duros para las empresas, sí se debe destacar que disminuir el consumo de combustible también tiene un efecto positivo en el ambiente.

Todos quieren legarles a sus hijos y nietos un planeta próspero en el que vivir. Sin embargo, la situación económica dificulta que las empresas de logística puedan contribuir a las metas ecológicas. Movildata responde a ese callejón sin salida. Las flotas ahorran dinero en los gastos de combustible habituales, cumplen con los plazos de entrega al evitar los atascos, disminuyen el desgaste de los vehículos y el estrés de los conductores, y también reducen el desperdicio de combustible, lo cual se traduce en menos contaminación liberada a la atmósfera por cada vehículo de la flota y en un impacto medioambiental inferior para la empresa en su conjunto.

Esto significa que un único sistema puede ayudar a los conductores, los vehículos, los plazos, el balance fiscal de la empresa y el propio planeta. A medida que los Gobiernos empiezan a apretarle las tuercas al sector de la logística por medio de la legislación para que se ponga al día, las empresas de flotas que se adelanten a las sanciones y cambios obligatorios obtendrán una ventaja sobre las que no lo hagan. No solamente ahorrarán dinero en gastos de combustible, sino que también satisfarán su deber para con el medio ambiente. Si bien todavía es imposible para las flotas más pequeñas pasarse por completo a la electricidad, los sistemas de planificación avanzada de rutas basados en los datos como Movildata son la siguiente mejor opción después de una flota eléctrica, tanto para la empresa como para el medio ambiente.